NO HACE FALTA UNA FOTO, ABRÍ LOS OJOS.
Aprovechando la situación los sectores opositores al gobierno kirchnerista criticaron la gestión de la electa presidenta Cristina Fernández, sin proponer nada para solucionar la vida de los millones de ciudadanos que continúan en la indigencia y la pobreza. Todos critican pero nadie se hace cargo de lo que todos vemos e ignoramos.
Me encantaría saber qué hacen los dirigentes del campo; la oposición como Lilita Carrió, Francisco De Narváez y Gerardo Morales; el Poder Ejecutivo; el Congreso Nacional y el Gobierno, del que todos somos cómplices, para ayudar a los que tienen menos. Pero eso no está en la agenda de los medios, lo que importa es lo que vende, como la declaración más polémica.
Lo que hay que entender es que lo relevante no es si la pobreza sea del 15%, como sostiene el Indec, o esté pasando el 30%, que ha medido la Iglesia, sino que ninguna persona deberían encontrarse en esa situación, sin excepción. Y en este país hay planes sociales, los cuales no alcanzan y muchísima gente critica. Es sorprendente como cuando los grandes medios hablan dos días seguidos de la situación, en la que están siempre los pobres e indigentes, la sociedad se acuerda de que existen.
A veces que discuto con algunos conocidos que consideran que no hay que darles vivienda ni alimento a las personas que viven en villas y, la verdad, es que me da mucha pena que se queden en el estereotipo del “Villero”, sin tomar conciencia de que se están refiriendo a una persona, un ser humano.
Se supone que somos ciudadanos porque tenemos derechos, que somos iguales y deberíamos tener las mismas oportunidades.
Hay que encarar la realidad que nos rodea, porque lo creas o no, te afecta.
Cuando puedas y quieras ayuda, aunque no esté de moda.